Celebrando su 110 cumpleaños, el iconico hotel de la cúpula rosa que sobresale del nº37 de la Promenade de los Ingleses en la localidad balnearia de Niza, ha inaugurado el pasado 24 de enero, su flamante spa. Bajo un innovador concepto que fusiona arte y bienestar, sus 700m2 se han convertido en el nuevo must de la Riviera Francesa para los amantes del lujo y del buen vivir de manera saludable.
Ubicado en el legendario palacio que corona la Costa Azul desde 1913, lugar favorito del jet set, donde era frecuente encontrarse con Dalí, la Princesa Grace de Mónaco o Elton John, hoy abre sus puertas N Le Spa, las instalaciones de bienestar del hotel que en 700m2 invitan a sus huéspedes a mimarse y a disfrutar del arte en un mismo lugar,
El arte del bienestar
Sin perder el foco en el concepto de la propiedad, donde el arte es su principal protagonista.
N Le Spa ha incursionado en un innovador enfoque en el mundo de los spas que utiliza el arte para mejorar el bienestar.
Especialmente diseñado para que los amantes del bienestar vivencien la misma experiencia que sienten al contemplar y admirar una pintura o una escultura que a su vez brinda reconexión con uno mismo.
De esta forma, el concepto del N Le Spa se basa en tres premisas: el Descubrimiento, donde a través de la tienda, permite a los clientes permite descubrir nuevos cosméticos, probar nuevos tratamientos y hasta un laboratorio que brinda la posibilidad de realizar un suero instantáneo a la medida. La Contemplación, por su parte, está reservada para la sala de relajación, el sauna finlandés, el hammam, las duchas experimentales y por supuesto los pasillos rodeados por piezas de arte de la colección del hotel. Por último, la Inmersión, permite a los huéspedes sumergirse en las salas de tratamientos, o en la piscina de luz natural, a través de una clase de yoga inmersiva donde se fusionan sonido y movimiento con el arte digital.
N Le Spa ha incursionado en un innovador enfoque en el mundo de los spas que utiliza el arte para mejorar el bienestar.
La arquitectura del bienestar
Sus instalaciones respiran arte en cada rincón. Desde la piscina con luz natural, el hidromasajes, sauna finlandés, hammam, duchas experimentales hasta sus siete salas de tratamientos, innvocan arte en su arquitectura y ornamentación sin dejar de lado la funcionalidad de los espacios.
Mi espacio favorito definitivamente es la Spa Suite privada que en sus 100m2 ofrece rituales para compartir de a dos, sauna y ducha privada y snacks saludables elaborados por el chef del hotel.
El majestuoso menú de servicios
Como siempre les digo, todo spa puede tener los más reconfortantes masajes con técnicas de alrededor del mundo, faciales rejuvenecedores que nos hacen creer que volvemos a cumplir 15 años o envolturas de barro con innumerables propiedades, pero el verdadero factor diferencial de cada spa está dado por Signature Rituals, esos rituales diseñados exclusivamente para cada spa y que no podrán encontrar en otro lugar.
Gran desafío es al que nos somete N Le Spa ya que todos sus signatures son exquisitos, pero si disponen solamente de 120 minutos, les recomiendo Great Vintage Experience. Exfoliación corporal y masaje inspirado en los mejores viñedos del mundo. Comienza con un exfoliante Grand Cru para mejorar la textura de la piel y continuar con un masaje multisensorial. La experiencia sigue con un facial global anti-age donde se puede optar por tu propio scrub, desde un Chardonnay Grand Cru “Chablis” scrub, o un Pinot Noir Grand Cru “Richebourg” scrub o mi favorito, el Grenache Noir “Terre de Provence” scrub.
Arte y bienestar fusionados en un solo lugar, complementan a este majestuoso hotel en el lugar perfecto que todo los spasianos debemos descubrir, contemplar e sentirnos inmersos al menos una vez en la vida.