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Haloterapia: el placer de respirar

Actualizado: 4 feb 2021

La sal ha sido utilizada desde épocas antiquísimas como remedio natural ante afecciones respiratorias y de la piel. En la actualidad, los beneficios desprendidos de someterse a los efectos de este mineral, ha dado lugar a lo que hoy conocemos como ¨haloterapia¨ o terapia de sal.

Fue en 1843, cuando el médico polaco, Dr. Boczkowski, implementó la sal como parte de una terapia, al detectar los beneficios obtenidos por los mineros, luego de pasar tiempo en cuevas de sales naturales. La salud de éstos era inmejorable a pesar de las largas horas de actividad laboral. Fue entonces, Europa del Este, el escenario donde comenzó a aplicarse por primera vez, la terapia, conocida a partir de la década del ´80, como haloterapia.


¿En qué consiste la haloterapia?


La haloterapia es una terapia natural complementaria que consiste en reproducir un clima similar al que se encuentra dentro de una mina de sal a través de un halogenador. Este dispositivo genera micropartículas de sal que al mezclarse con el aire de la sala, generan un ambiente libre de alérgenos y patógenos, que al ser inhaladas por los pacientes, acceden a todas las partes del sistema respiratorio. La terapia de sal consiste simplemente en sentarse una cueva especialmente ambientada que recrea las condiciones de una cueva de sal sobre el suelo durante una sesión que suele durar entre 40-60 minutos. Muy pocos hoteles disponen de las salas de sal y practican esta terapia debidamente.

En estos momentos, donde los spalovers optan por reemplazar las terapias de contacto físico por otras opciones, la haloterpia parece ser la solución perfecta. No solo la sal es antibacteriana, antiinflamatoria y 100% natural, sino además ofrece beneficios respiratorios e inmunológicos. Es hora de ponerse creativos y con muy poca inversión, transformar espacios, incluso hasta se pueden brindar clases de yoga o meditación guiada en las cuevas o salas de sal.


Beneficios de la terapia de sal


✔ Presenta resultados favorables para afecciones pulmonares crónicas como el asma, la bronquitis, la sinusitis, la tos, la gripe, el epoc, las alergias y la constipación.

✔ Mejora la respiración ya que reduce los síntomas de inflamación de la mucosa.

✔ Muy recomendada para quienes padecen alteraciones de la piel como dermatitis, acné, psoriasis, eczemas y cicatrices. Las partículas que se depositan en la piel ayudan a equilibrar el PH.

✔ Fortalece el sistema inmunológico.

✔ Mejora el rendimiento en deportistas ya que aceleran la recuperación luego de que los músculos pierdan gran cantidad de agua y sales, generando agotamiento físico, psíquico y mental. Además, de mejorar la calidad de la respiración.

✔ Estimula la relajación y reducción del stress debido al ambiente saturado de iones negativos, que promueven la eliminación de toxinas.


¿Qué tipo de sal se emplea en las terapias?


La haloterapia se practica preferentemente con sal roca ya que justamente es una terapia realizada dentro de las minas de sal (espeleoterapia) y es la que se empleó para realizar los primeros estudios médicos. Su composición además es muy estable, a diferencia de la sal del Himalaya por ejemplo, que presenta impurezas perjudiciales para las vías respiratorias o la sal marina.

La sal roca, también conocida como sal gema, se conforma por cristales de cloruro de sodio que cristalizan en el sistema regular, en forma cúbica la mayoría de las veces. Este mineral es extraído por evaporación en balsas de poco fondo y mucha extensión que se llaman saladeras.








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